La restauración de la isla de Tenerife abre sus puertas tras el confinamiento por el coronavirus
La restauración en la isla de Tenerife, tras los más de cien días de confinamiento, ha comenzado a dar los primeros pasos con las incertidumbres de hasta cuánto durarán los ERTE -todavía hay mucho personal que no se ha incorporado al puesto de trabajo-, la disminución de los aforos y, por tanto, de la caja que, al final, es la que te pone los pies en la tierra, y las nuevas medidas decretadas esta misma semana por el Gobierno de Canarias sobre el uso de mascarillas en el interior de los restaurantes.
En la zona Sur de Tenerife, y más concretamente en la parte turística van abriendo locales, poco a poco, siempre pendientes de los tiempos, que de momento no volverán, en que Canarias sumaba récords de llegada de turistas.
En Santa Cruz hay varios negocios de restaurantes, que han abierto sus puertas, algunos no cerrarán en agosto, y otros descansarán unos días.
Aquí selecciono algunos de los platos que me han sorprendido gratamente, y que repetiría, tras el periodo de confinamiento. En Santa Cruz se puede comenzar por el Solana, sito en la calle Puerta Canseco, 37, del chef Nacho Solana, que mantiene hasta el día 12 un menú basado en la trufa. Pero el plato que me sorprendió fue un Cocoon de cangrejo real, tartar de aguacate y kimchee, que estaba para repetir.
Otro clásico en Santa Cruz es el restaurante Nielsen, del chef Danny Nielsen, que en un encuentro de la Academia de Gastronomía de Santa Cruz de Tenerife, preparó un solomillo Wellington con champiñones Portobello, jamón de bellota y mostaza en hojaldre y su jugo. Un plato que borda el chef danés y que se sirve por encargo.
También en la capital, otro que ha dado que hablar es el Étereo de Pedro Nel Restrepo, en la calle San Antonio, 63. Sus carnes, especialmente la rubia gallega, son más que recomendables.
Armando Saldanha, en El Gato Negro, en Rambla de Santa Cruz, 31, aporta su toque personal al steak tartar con huevo de codorniz. Imprescindible.
Seguimos con un renovado Los Tronkos, que acaba de celebrar unas jornadas ‘japo’ a cuatro manos entre Moisés Marce y Orlando Rojano, del cercano Aiko. Junto a la carta ‘japo’ mantuvieron el menú tradicional y, por supuesto, los huevos a la inglesa. Muy bueno el nigiri de cherne & chips de jamón y foie.
De los primeros que abrió en el Sur de Tenerife fue el Qapaq, en la avenida La Habana 14, en Los Cristianos, donde cocina Rosa Lía Díaz Cieza, de origen peruano. Los ceviches son una de sus especialidades y concretamente el nikkei de atún de temporada, con aguacate, soja y alga nori. Un entrante ideal para estos tiempos de calor.
En Tegueste, en la calle San Ignacio, 17 está La Sandunga, de Gonzalo Tamames, con ese amplio ventanal que muestra los viñedos de la zona. En la reciente visita el plato recomendado era la carrillera de cebón, pero cualquier otro es una apuesta segura.
Ya en El Sauzal, muy cerca del mercado, está AIE, de Omar Bedia, que ha aprovechado el confinamiento para dar unos retoques al comedor, diáfano y alegre, y mantener la carta en una pizarra que sigue estando permitido en las nuevas normas de Sanidad. El arroz con camarón rojo, con potentes sabores marinos, entre las sugerencias.
Los langostinos con aceite de pimiento son un entrante de esos de mojar pan que ofrece el restaurante Bambi Gourmet, en la calle Enrique Talg, 15, de Puerto de la Cruz, de Rodica y Daniel Gurau.
Tras las recomendaciones, ahora toca disfrutar de estos platos y apoyar a la restauración. | José L. Conde